Las organizaciones de ayuda humanitaria IsraAid y SmartAID de Israel envían ayuda humanitaria a Haití luego de que dos terremotos azotaran al país caribeño el sábado14 de agosto.

Luego de que unas 1.300 personas murieran y 5.700 resultasen heridas tras un terremoto de magnitud 7,2 frente a la costa norte y otro de magnitud 6,6 en el sur cerca de Les Cayes, el gobierno haitiano declaró el estado de emergencia.

Edificios y catedrales históricas quedaron reducidas a escombros y el temor es que la inminente tormenta tropical Grace, que llevará consigo fuertes lluvias y posibles inundaciones y deslizamientos de tierra, agrave la crisis humanitaria.

El equipo de respuesta de emergencia inicial de IsraAID incluirá a ex miembros locales que trabajaron junto a pares israelíes durante ocho años junto a voluntarios del equipo israelí e internacional de la ONG que arribará al lugar en los próximos días.

Allí, IsraAID distribuirá artículos de primera necesidad que se necesitan con urgencia y evaluará las necesidades adicionales que pueden satisfacer sus especialistas en agua, saneamiento e higiene y primeros auxilios psicológicos y salud mental.
IsraAID envió por primera vez un equipo a Haití luego de un terremoto de 2010 que mató a más de 220.000 personas. En 2016, el equipo local respondió también al huracán Matthew.

Yotam Polizer, director ejecutivo de IsraAID, se comprometió a “estar hombro con hombro con los haitianos durante el tiempo que se nos necesite para reconstruir mejor el país”.

A su vez, SmartAID -en asociación con Third Wave Volunteers- empezó a enviar pequeños grupos de voluntarios para evaluar las áreas afectadas desde Les Cayes hasta Jeremie.

“Nuestro equipo de ayuda coordina sus esfuerzos con los socorristas locales y otras agencias de asistencia. Ofreceremos agua potable y energía para que las familias afectadas puedan sobrevivir las primeras semanas”, explicó Shachar Zahavi, director y fundador de SmartAID,

El jefe de los voluntarios indicó que SmartAID distribuirá equipos de protección a los trabajadores de la salud y al personal de primeros auxilios ya que el COVID-19 aún se extiende por toda la isla.