La ciudad de Buenos Aires rindió homenaje recientemente al doctor Alejandro Roisentul, presidente de la Asociación Israelí de Cirugía Oral y Maxilofacial, por su labor humanitaria a favor de sirios heridos en la encarnizada guerra civil que tiene lugar en Siria.
Roisentul, jefe de la unidad de cirugía maxilofacial del Centro Médico Ziv, Safed, a unos 65 km de la frontera con ese país, ha tratado a cientos de sirios que han sido traídos a Israel para recibir cuidado médico.
De 53 años de edad, se graduó en la escuela dental de la Universidad de Buenos Aires en 1986, tres años antes de emigrar a Israel.
“Los heridos, incluso niños, llegaron a pie a la frontera con Israel en condiciones muy malas. Las Fuerzas de Defensa de Israel los trajeron al hospital, donde les hemos ayudado”, dijo Roisentul en declaraciones a medios argentinos.
“He tratado a gente con heridas muy graves en la cabeza y la boca; muchos no pueden hablar o comer bien, pero regresan a Siria con una sonrisa en la cara. También les ayudamos con ropa y en ocasiones viven en el hospital durante meses”, dijo “Nos consideraban [a los israelíes] enemigos, pero después de recibir cuidados ven las cosas desde otro punto de vista”.
«Mi sueño es que los niños sirios heridos que trato puedan algún día jugar en paz con mis hijos «, dijo Roisentul, padre de tres.
Desde 2011, unos 3.000 sirios heridos han recibido cuidados médicos gratis en hospitales israelíes, la mitad de ellos en el Ziv.
“Roisentul es uno de tantos que se han propuesto mejorar el lugar en el que viven y ayudar a quienes lo necesitan», dijo el embajador de Israel en Argentina, Ilan Sztulman, en la ceremonia, que estuvo presidida por Claudio Avruj, secretario de Derechos Humanos del Ministerio de Justicia.
La ceremonia fue parte de una serie de eventos para reconocer la labor humanitaria en favor de sirios desplazados o heridos por una contienda que no cesa.
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