Cuando le diagnosticaron cáncer a Asaf Zviran este realizaba una investigación operativa en la Armada de Israel y obtenía su maestría en el Instituto de Tecnología Technion.

Tal vez fue por eso que se imaginó al cáncer como un enemigo a derrotar si podía encontrar el arma y el objetivo adecuados.

En 2012, luego de superar con éxito un tratamiento y finalizar siete años de servicio militar, Zviran empezó sus estudios de doctorado en biología molecular en el Instituto Weizmann de Ciencias.
Durante su investigación postdoctoral en el Centro del Genoma de Nueva York (entre 2016 y 2019) se enfocó en su objetivo: el cáncer que persiste o regresa después del tratamiento.

Mientras trabajaba con científicos de clase mundial, con la ayuda de inteligencia artificial desarrolló un método de secuenciación del genoma completo que permite detectar de forma temprana la presencia de células cancerosas persistentes o recurrentes a partir de una muestra de sangre estándar.

El doctor Asaf Zviran,  cofundador y director ejecutivo de C2i Genomics. Foto cortesía de C2i

Ni bien terminó su beca de posdoctorado, Zviran y tres amigos fundaron C2i Genomics para desarrollar su enfoque de medicina personalizada descrito en un artículo publicado en Nature Medicine.
Su mentor postdoctoral fue el oncólogo Dan Landau de Weill Cornell Medicine, cofundador científico de la empresa y que hoy forma parte de su consejo asesor.

“Con nuestra tecnología, los médicos pueden monitorear la respuesta al tratamiento de sus pacientes y detectar el fracaso de este o la recurrencia de la enfermedad meses e incluso años antes de lo contrario”, explicó Zviran.

Comando, control e inteligencia

“C2i es un término militar para resumir ‘comando, control e inteligencia’ y que expresa la visión de aplicar metodologías de defensa a la oncología”, explicó Boris Oklander, cofundador de la empresa y su jefe de tecnología.

Para él, el cáncer es como un enemigo con una señal única de una mutación que hay que detectar. “Luchamos contra este enemigo con tecnología basada en nuestra experiencia en el sector de defensa”, describió Oklander

Doctor Boris Oklander, cofundador y director de tecnología de C2i Genomics. Foto cortesía de C2i

Con sede en Nueva York, instalaciones de investigación y desarrollo en Haifa y un laboratorio de secuenciación en Cambridge, Massachusetts, C2i Genomics es una de las nueve empresas emergentes de atención médica digital en la cohorte actual de PlayBeyondBio, una aceleradora administrada por una asociación del fondo de capital de riesgo israelí JVP, el gigante farmacéutico británico-sueco AstraZeneca, la consultora internacional Accenture, Margalit Startup City, Amazon AWS y el Centro Médico Shaare Zedek de Jerusalén.

“La idea es ver cómo este ecosistema de socios puede unir fuerzas y generar estudios piloto. Hay biobancos de muestras de pacientes en Shaare Zedek que pueden ayudar a evaluar y validar tecnologías como la nuestra y ayudar a que nuestro servicio de diagnóstico plug-and-play se comercialice rápidamente”, indicó Oklander.

En julio de este año, C2i firmó un acuerdo de colaboración con Premier, una compañía de EEUU de mejora de la salud. El convenio incluye la implementación de la plataforma C2i en ocho hospitales y clínicas miembros de Premier.

Adiós al tratamiento excesivo e insuficiente

En charla con ISRAEL21c en Español, Oklander explicó que el enfoque único de la empresa podría resolver el problema significativo del tratamiento excesivo o insuficiente de los tumores sólidos.

Lo que suele ocurrir es que el tumor se extirpa de forma quirúrgica, el informe de patología ayuda al oncólogo a adivinar si debe esperar y monitorear al paciente de forma periódica o comenzar la quimioterapia o la radiación como precaución contra las células cancerosas no detectadas.

“No existe una buena forma de saber en tiempo real si el paciente está libre de cáncer”, dijo Oklander.

Los pacientes que reciben quimioterapia deben esperar meses antes de saber si hay una buena respuesta. Aquellos que son monitoreados pueden tener un tumor que crece sin ser detectado durante ese tiempo.

“Si tenemos la posibilidad de medir el nivel de cáncer en la sangre del paciente en tiempo real, como el nivel de glucosa en los diabéticos, no hace falta predecir sino justamente calcular lo que está sucediendo en ese momento y respaldar la toma de decisiones clínicas relacionadas con qué tratamiento para usar, o para monitorear e intervenir tan pronto como sea necesario”, añadió.

Con 20 millones de nuevos diagnósticos de cáncer en todo el mundo cada año, este método podría salvar a muchas personas de ser tratadas en exceso con quimioterapia tóxica, dolorosa y costosa y de recibir un tratamiento insuficiente mientras un nuevo tumor crece de forma silenciosa.

“Nuestra prueba puede mejorar todo el ciclo para el paciente y los seguros”, explicó Oklander en referencia a las compañías aseguradoras que hoy cambian su enfoque hacia el reembolso basado en evidencia para mejorar la economía de la oncología.

Primero en el mundo

Si bien hay otros servicios de genómica del cáncer disponibles, la plataforma de C2i está diseñada para ser accesible y completa de manera única.

“La forma en que trabajan nuestros competidores es que las muestras de sangre de los pacientes se envían a un laboratorio central, generalmente en EEUU. Nuestra solución distribuida es logísticamente más simple porque la muestra se puede procesar en cualquier laboratorio de secuenciación genómica. Hay 15.000 secuenciadores en el mundo, que son las máquinas que producen datos genómicos a partir de muestras de sangre. Cada uno de ellos puede comunicarse con nosotros a través de una conexión segura a Internet”, contó Oklander.

El cumplimiento de las regulaciones de privacidad de GDPR (Europa) e HIPAA (EEUU) se configura en el sistema C2i para cada región.

La otra diferencia es que C2i escanea todo el genoma para encontrar miles, o cientos de miles, de mutaciones únicas para cada paciente.

“En dos personas con el mismo diagnóstico de cáncer, menos del uno por ciento de las mutaciones son comunes entre los dos. Nosotros capturamos la composición genómica completa de cada paciente usando inteligencia artificial y procesamiento de señales. Luego, analizamos la sangre en todas las etapas del tratamiento para ver si estas mutaciones aún están presentes”, definió el directivo.

Por su parte, Zviran señaló que C2i Genomics fue finalista para el Premio Spinoff 2021 otorgado por Nature y Merck.

“Estamos orgullosos del reconocimiento de nuestro trabajo que detecta cantidades ultra bajas de ADN tumoral en muestras de sangre para guiar las decisiones de tratamiento y, en última instancia, salvar la vida de los pacientes”, definió.

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