Cuando mi esposa tuvo problemas para dormir su médico la derivó a un laboratorio del sueño que le ofreció dos opciones: podía pasar la noche internada o llevarse el equipo de monitoreo a casa y dormir en su cama. Ella optó por lo segundo.

Sin embargo, el equipo era complejo. Constaba de cinturones elásticos para medir su respiración, un oxímetro de dedo para monitorear los niveles de oxígeno, un cable delgado pegado a su nariz y boca, y un aparato del tamaño de un antiguo walkman para registrar los resultados.

Y los hay peores: otros equipos de monitoreo -los que rastrean la actividad cerebral- incluyen electrodos adheridos con ventosas, crema o gel.

Con todo ese aparatejo atado a su cuerpo fue un milagro que mi esposa pudiera dormir. Ella no podía ponerse de lado, que es como normalmente consigue relajarse.

La ardua experiencia ayuda a explicar por qué muchos problemas del sueño no se diagnostican.

Hoy, la startup X-trodes de Tel Aviv propone una nueva solución. Se trata de un sistema menos invasivo y más cómodo para realizar la medición electrofisiológica de grado médico.

Este nuevo método puede utilizarse en un laboratorio del sueño o en el hogar.

Más de cien usos médicos

La compañía llama “piel inteligente” a este desarrollo y su función no es solamente para medir el sueño.

“Hay más de cien usos médicos para la electrofisiología pero decidimos centrarnos en apenas dos para nuestro primer producto: el sueño y la rehabilitación remota de lesiones musculares”, le dijo Ziv Peremen, director ejecutivo de X-trodes, a ISRAEL21c en Español.

Los electrodos Smart Skin de esta nueva solución pueden medir hasta diez horas de ondas cerebrales (EEG), movimiento ocular (EOG), músculos esqueléticos (EMG), actividad cardíaca (ECG) y activaciones olfativas (EOIG).

Los electrodos inalámbricos no adhesivos recopilan y transmiten datos a través de Bluetooth. Foto cortesía de X-trodes

Esta tecnología fue desarrollada durante unos 15 años y la dirección del proyecto estuvo a cargo de Yael Hanein, profesora de ingeniería eléctrica en la Universidad de Tel Aviv.
La científica se interesó en la electrofisiología cuando estudiaba en la Universidad de Washington en Seattle (EEUU).

“Hace mucho tiempo me topé con este problema abierto de cómo mejorar la electrofisiología de la piel. Todos estaban limitados por estos cables y los enormes equipos pero no teníamos una solución. Hoy la tenemos”, le contó Hanein a ISRAEL21c en Español.

Ramot, la compañía de transferencia tecnológica de la Universidad de Tel Aviv, facilitó la licencia del trabajo de Hanein para lanzar X-trodes en 2020.
En la actualidad, Hanein divide su tiempo entre su investigación universitaria y su puesto de directora de tecnología de X-trodes.

Recientemente, los electrodos se usaron en un estudio del Instituto de Tecnología  Technion de Israel para detectar a “mentirosos” por los movimientos de sus músculos faciales.

Cien por ciento inalámbrico

Los electrodos están hechos de un material suave y flexible, y son similares a pequeñas pegatinas. Sin embargo, cada uno tiene más de diez capas.

Los electrodos son desechables pero los usuarios pueden ducharse con ellos. Foto cortesía de X-trodes

“Son desechables. A los pocos días hay que tirarlos pero igualmente la gente puede ducharse y sumergirse con ellos”, explicó Peremen.

Una tira de cinta médica mantiene a los electrodos inalámbricos en su lugar. Estos transmiten datos a un pequeño receptor a través de Bluetooth y éste los envía al dispositivo móvil del paciente o del médico.

La información tiene como objetivo integrarse a los sistemas de software existentes de un profesional de la salud. “Tratamos de dar exactamente la misma información que un médico obtendría de un estudio del sueño para que todo sea lo más transparente posible”, indicó Peremen.

El ejecutivo señaló que hasta un tercio de la población de EEUU sufre algún tipo de trastorno del sueño pero que la mayoría de las personas se resiste a ir a un laboratorio del sueño.

Debido a que hay muchos tipos de perturbaciones del sueño -desde el simple insomnio hasta la narcolepsia y trastorno del comportamiento del sueño REM (RBD), Hanein prevé que los pacientes usen sus X-trodes durante varias noches.

“Una prueba de una noche puede no decir nada. Si es el problema es episódico éste puede aparecer una noche y no la siguiente”, describió.

Peremen destacó que si bien ya hay dispositivos como el Apple Watch que pueden rastrear el sueño, estos no son de grado médico y están más enfocados en la apnea. “No conocemos a nadie que pueda alcanzar el mismo nivel de calidad que nosotros”, aseguró el ejecutivo.

Aplicar luego de una lesión

Si se trata de rehabilitación muscular, desde X-trodes indicaron que la solución puede monitorear lo que sucede mientras el paciente que se recupera camina o corre, y optimizar los programas posteriores a la lesión con evaluaciones personalizadas.

“Se puede saltar, andar en bicicleta, caminar y correr con esta tecnología no invasiva”, explicó Peremen.

La solución puede medir los patrones musculares en tiempo real, la tasa de fatiga y la simetría entre las piernas. “Cuando hablamos de lesiones, el equilibrio es un gran problema, al igual que la rehabilitación. Si aquel que sufrió la lesión no lleva a cabo el proceso de rehabilitación de forma correcta, el dolor puede volverse crónico”, señaló Peremen.

Los electrodos de X-trodes pueden también medir patrones musculares. Foto cortesía de X-trodes

Pero X-trodes no es solo un hardware: el aprendizaje automático y los algoritmos inteligentes comparan con rapidez los datos de un paciente que usa el dispositivo con los resultados de otros que se cargaron en la nube de la empresa.

Al momento de dormirse, el paciente coloca cuatro electrodos en su frente, dos al lado de los ojos y otros dos en la barbilla.
Para la rehabilitación muscular, el total es de 16 electrodos.

“Cuando las personas tienen puestos los electrodos, la escena pare de ciencia ficción. Es muy emocionante ver que podemos expandir el horizonte de lo que se puede hacer con el monitoreo de grado médico y hacerlo accesible para muchos. No se trata solamente de un dispositivo médico sino que es una solución de datos que nos da acceso a información que hasta hoy era inalcanzable”, remarcó Peremen.

Por estos días, los electrodos de X-trodes son probados por 20 grupos de investigación de todo el mundo.
Este año, la empresa presentará su solución a la Administración de Medicamentos y Alimentos de EEUU (FDA) con la esperanza de tener un producto aprobado y disponible para el segundo trimestre del año que viene.

El COVID como motor creativo

De izquierda a derecha, Alon Nester (director financiero), Yael Hanein (jefa de tecnología) y Ziv Peremen (director ejecutivo). Foto cortesía de X-trodes

¿De qué forma impactó el COVID-19 en la empresa?

X-trodes tiene hoy 24 empleados. Hanein dijo que el hecho de que las personas no podían acceder a pruebas de sueño decentes era algo bien conocido incluso antes de la pandemia.

“De todas formas, estamos muy orgullosos de haber logrado construir la compañía, contratar personas, conseguir fondos y aprender a comunicarnos con los inversores y el personal en línea durante la crisis del COVID-19”, le contó Hanein a ISRAEL21c en Español.

Según Peremen, la pandemia aumentó de forma drástica el interés en la telemedicina y el monitoreo remoto. “Nos dio un gran impulso”, concluyó.

Para más información sobre X-trodes o unirse a los estudios actuales de sueño en el hogar, clic aquí.