¿Es posible que las universidades hayan comenzado a ofrecer becas a deportistas virtuales? Sí, y por eso los deportes electrónicos están en el centro de la escena mundial.

Casas de estudio de EEUU como las universidades de Miami, Missouri y Texas ya entregan becas de alrededor de 10.000 dólares -unos 34.000 shekels- a jugadores prometedores de videojuegos como Fortnite, Counter-Strike y League of Legends.

Incluso, en ese país hay una asociación profesional llamada The National Association of Collegiate Esports.
Entre las cien escuelas de América del Norte que ofrecen deportes electrónicos, las becas crecieron un 480 por ciento en el último año.

Pero, ¿dónde pueden entrenar los competidores serios? La startup israelí Novos.gg tiene la respuesta para los jugadores del súper popular Fortnite, que tiene unos 80 millones de usuarios mensuales y más de 350 millones de cuentas de jugadores.

Por una suscripción mensual de 9,90 dólares -unos 34 shekels- tanto los jugadores principiantes como los expertos de Fortnite pueden ver videos de entrenamiento y participar en sesiones interactivas semanales.

El suscriptor promedio entrena alrededor de nueve horas a la semana en Novos e inicia sesión al menos una vez al día.

Los algoritmos de Novos personalizan lo que un jugador necesita: todos los datos provienen de la interacción de un jugador con la computadora, a diferencia de las tecnologías de entrenamiento para deportes del mundo real, como PlayerMaker, que desarrolló un sensor físico que se usa en los zapatos de un jugador para realizar un seguimiento del rendimiento.

“La mayoría de los jugadores básicamente no saben qué hacer, solo juegan. “Cuando se compara con cualquier otro deporte, eso no tiene sentido”, explicó Or Briga, el director ejecutivo de Novos.

Típico de un raro

Briga debería saberlo: ha estado jugando desde que tiene memoria.

El ejecutivo creció en Karmiel, en el norte de Israel donde, según dijo, “aparte del festival de danza que se lleva a cabo durante tres días cada año, no sucede nada más”.
Allí se enamoró de los juegos y creció como una “especie de raro”.

Después de terminar el servicio militar, Briga se mudó a Hong Kong durante dos años para trabajar para El Al Security. Durante las horas libres, se convirtió en parte de un equipo de deportes electrónicos amateur llamado “Los Extranjeros” ya que todos los que participaban eran foráneos.
“Fue una experiencia increíble, y sabíamos que solo era cuestión de tiempo antes de que llegara a Occidente”, recordó.

Briga regresó a Israel para estudiar derecho en la Universidad Reichman en Herzliya. Mientras estaba en el programa Zell Entrepreneurship conoció a Shai Arnon, que se convertiría en su cofundador en Novos.

A la izquierda, los cofundadores de Novos: Or Briga y Shai Arnon. Foto cortesía de Novos

“Ambos teníamos pasión por los juegos y sabíamos que queríamos hacer algo para ayudar a los jugadores a mejorar. Simplemente no entendíamos cómo hacerlo en ese momento”, expresó Briga.

Lentamente, lo que se convertiría en Novos comenzó a tomar forma.

Practica deliberada

“Usamos una metodología de práctica deliberada en la que tomamos una actividad y la dividimos en pedazos pequeños”, le contó Briga a ISRAEL21c en Español.

Si Novos estuviera entrenando a jugadores reales en una cancha física de baloncesto, Briga cree que les pediría a los jugadores que subieran y bajaran de una caja para mejorar su memoria muscular. Luego, sostendrían la pelota en una mano y saltarían.

“Se necesita desarrollar la memoria muscular en torno a la mecánica del juego, cómo se usa el teclado y el mouse. No es algo que se hace una vez, sino que es un proceso. Es por eso que gente como Lionel Messi -el astro de fútbol argentino- va a la práctica regular”, explicó.

Briga contó que un día típico de entrenamiento de Novos comienza con un calentamiento, luego se pasa al evento principal, como movimientos rápidos: esa es una habilidad en la que se mueve el mouse muy rápido de un lado a otro.
“Hay una técnica y mostramos a los jugadores cómo hacerlo bien. Solo entonces enviamos a los jugadores a Fortnite con un mapa específico donde pueden practicar lo que acaban de aprender”, manifestó.

Si bien los videos están alojados por expertos en juegos, nada en Novos es realmente en vivo.

Fama y gloria

¿Qué motiva a los jugadores a gastar diez dólares al mes para mejorar su juego?

Después de hablar con miles de jugadores, tres razones se filtran a la parte superior.

  • Ganar: a los jugadores les gusta el dinero en efectivo y estar en un equipo profesional.
  • Fama y gloria: eso es lo que motiva a los jugadores a transmitir su destreza en los juegos en plataformas como Twitch, para que otros los vean.
  • Aceptación social: para geeks como Briga, esto ha sido clave. “Los jugadores de hoy son súper geniales. Es como ser un jugador de fútbol”, afirmó.

Grandes negocios

Los juegos en línea son un gran negocio: la primera Copa Mundial de Fortnite tuvo lugar en Nueva York en 2019 y repartió un premio de 30 millones de dólares.
El mayor ganador se llevó a casa 3,5 millones de dólares. En ese momento tenía solo 16 años.

Briga aseguró que no solo tuvo suerte: “Es un jugador realmente talentoso. Se trata de las habilidades al final del día”.

Novos apunta al mercado amateur, ya que los profesionales tienen clases de juego, donde todos los jugadores vivirán en una casa.
El segundo piso es donde se quedan, el primer piso es donde practican. Tienen un chef que prepara sus comidas, un entrenador físico y un analista para revisar los datos. Hacen entrenamiento físico y mindfulness; aprenden una práctica de respiración y cómo todo afecta su rendimiento en el juego.

En otras palabras, los profesionales han ido mucho más allá de una plataforma de capacitación en video.

A pesar de las similitudes y las crecientes becas, los deportes electrónicos siguen siendo muy diferentes a los deportes del mundo real.

“En el fútbol, ​​nadie es dueño del deporte. En los deportes electrónicos, el editor del juego es dueño del juego en sí. Y los videojuegos siguen evolucionando y cambiando. Después de tres o cuatro meses, el editor lanzará una nueva temporada o un nuevo capítulo”, señaló Briga.

A principios de este año, Novos organizó un torneo de juegos en persona entre empresas de alta tecnología en Israel, copatrocinado por Geektime. Cerca de 200 empresas se inscribieron en el torneo en el NOM Gaming Lounge en Tel Aviv.

Un equipo de Palo Alto Networks ganó el primer lugar en el torneo de juegos organizado por Novis en Tel Aviv. Foto cortesía de Novis

Usuarios de todo el mundo

En los seis meses transcurridos desde el lanzamiento de Novos la compañía ha sumado jugadores de todo el mundo, incluso de Japón, Corea y Filipinas, además de la base central de América del Norte y Europa.

El idioma de instrucción es el inglés. Los 17 miembros del personal de Novos se encuentran en Singapur, los Países Bajos, el Reino Unido, Canadá, EEUU e Israel.

Empleados de Novos y su mascota en Tel Aviv. Foto cortesía de Novos

Briga no dice exactamente cuántos usuarios tiene la empresa (Calcalist informó en 2021 que la empresa había capacitado a 50.000 jugadores aunque Briga admite que el número actual es probablemente más de 100.000.

Como es nuestra costumbre en estos días, ISRAEL21c en Español le preguntó a Briga si la pandemia de COVID-19 cambió la forma en que la empresa hace negocios.

“Ayudó, sí. Ahora tenemos un nuevo tipo de jugador que nunca antes había jugado. Tal vez eran jugadores de fútbol o baloncesto y no pudieron practicar su deporte durante la pandemia. Todos sus amigos estaban jugando Fortnite y ahora tenían esta brecha de un año. Entonces, estaban buscando formas de entrenar”, definió el emprendedor.

En cuanto al nombre Novos, a Briga le sonaba bien. El sufijo “gg” se refiere a “una pequeña isla en medio de la nada”, dijo Briga. Y añadió: “Pero para los jugadores, significa buen juego. Los jugadores se envían un ‘gg’ entre ellos si fue un buen juego o, si no queda nada que un jugador pueda hacer, enviarán un ‘gg’ en un chat para rendirse”, finalizó.

Para más información sobre cómo entrenar con los mejores, clic deportes electrónicos.