Israelíes de todos los orígenes y credos se unieron en el dolor durante el fin de semana luego de la tragedia ocurrida el jueves 29 a la noche en el Monte Meron cuando tuvo lugar una estampida humana que dejó un saldo de 45 muertos. Además ofrecieron comida y refugio, y donaron sangre a los sobrevivientes y sus familiares.

El hecho ocurrió el jueves por la noche cuando miles de ultraortodoxos judíos se unieron para la celebración masiva anual de la fiesta de Lag BaOmer.

Las fuerzas de rescate operan en el lugar del desastre en el monte Meron. Foto: David Cohen/Flash90
Las fuerzas de rescate operan en el lugar del desastre en el monte Meron. Foto: David Cohen/Flash90

Hacinados en un pasillo estrecho de salida, los asistentes se aplastaron entre sí antes de que los servicios de emergencia en el lugar pudieran comenzar a evacuar las instalaciones.

Cuando se conoció la noticia, el pueblo de Israel comenzó a ayudar a los sobrevivientes de forma inmediata. Residentes de ciudades árabes y drusas en el norte de Israel levantaron centros de refrigerio para los evacuados en su camino a casa y se prepararon para recibir a aquellos que no pudieron volver a sus hogares a tiempo para el shabat.

Durante el fin de semana, se instalaron estaciones de donación de sangre en todo el país y tanto judíos seculares como religiosos se alinearon para donar.
De acuerdo con la red de emergencias nacional Magen David Adom, al cierre de esta nota se habían realizado más de 2.000 transfusiones.


A su vez. la Residencia del Presidente estableció una línea directa para ayudar a las personas que buscaban a sus seres queridos. Es que durante el desastre, la red celular en el sitio colapsó, lo que dificultó el contacto e identificación de las víctimas.

Por su parte, la aerolínea El Al también anunció que ofrecerá vuelos gratuitos a Israel para los familiares directos de los fallecidos.

Personal de rescate revisa el lugar de la tragedia. Foto: Aharon Baruch Leibowitz/ZAKA

 

Durante todo el fin de semana, los eventos culturales y los conciertos musicales fueron suspendidos en solidaridad con las familias de los fallecidos y los sobrevivientes, y las estaciones de radio sólo pasaron música solemne generalmente asociada con los días de duelo de Israel.

El domingo, las banderas de todo el país y las misiones diplomáticas de todo el mundo se bajaron a media asta luego de que Israel marcara un día nacional de luto.

La celebración anual en el norte de Israel siempre es un evento masivo pero este año se esperó con mucho más fervor luego de que se levantaran algunas de las restricciones por el COVID-19.

Miles de judíos ultraortodoxos celebraban Lag BaOmer antes de la estampida. Foto: David Cohen/Flash90

 

“Esta es una de las tragedias más difíciles que he tenido que enfrentar durante mi voluntariado en la organización ZAKA. Había gritos y pedidos de ayuda en todas partes. Los médicos y paramédicos les administraban resucitación cardiopulmonar a algunos de ellos. Había olor a muerte y duelo en el aire mientras aparecían más y más camillas con personas sin vida”, contó el voluntario Haim Spielberg, que brindó primeros auxilios en el lugar.