La avenida Dizengoff, donde vive la moda, comida y diversión de Tel Aviv, se extiende por tres kilómetros hacia el norte desde el bulevar Rothschild hasta el puerto de la ciudad.

Llamada así por el fundador, urbanista y primer alcalde de Tel Aviv, Meir Dizengoff, esta calle siempre tiene algo que ofrecerle a todos. Y eso no es una exageración si se tienen en cuenta las vidrieras que bordean la calle y los más de 400 negocios en el Dizengoff Center, el primer centro comercial cubierto en Israel.

Caminar por Dizengoff es una actividad tan difundida que incluso se acuñó el verbo del argot “Lehizdangef” para describir esa acción.

Peatones pasean por Dizengoff en Tel Aviv. Foto: Marion Fischel

Un día típico en Dizengoff tiene tres etapas distintas: la primera tiene lugar en horario de oficina cuando los cafés se llenan de emprendedores, diseñadores y agentes inmobiliarios, así como de visitantes locales e internacionales.

Alrededor de las 17 comienza la fase 2, cuando los dueños de perros sacan a pasear a sus mascotas, y se puede ver a otros lugareños trotando con ropa deportiva de camino al gimnasio o la playa.

La etapa 3 comienza alrededor de las 19 con el “Happy Hour” ofrecido en los numerosos bares de la avenida.
A las 21, los bares se llenan de asistentes a fiestas de cumpleaños y otras celebraciones, y las mesas de los restaurantes también comienzan a completarse.

La última hora de cierre para los establecimientos acérrimos es las 5.

Moda israelí y ropa de novia

Interior de la boutique de Kedem Sasson en Dizengoff. Foto: Marion Fischel

Dizengoff es un destino de moda, especialmente si se busca ese vestido diseñado para una boda o un evento especial.

Entre los muchos diseñadores locales representados en esta calle están Kedem Sasson en Dizengoff 203 y Orna Alami en Dizengoff 218.

La calle también es conocida por sus tiendas de novias, que cambian de manos con frecuencia. Actualmente, las boutiques de vestidos de novia incluyen a Moransh Evening & Bride, Helena Kolan y Dorin Fashion.

Si se trata de zapatos de boda y para noche agradables, se destacan Aro Bridal Shoes que está en el negocio del calzado desde 1931.

Centro Bauhaus

En 2003, Tel Aviv fue reconocida por la UNESCO como un sitio arquitectónico y cultural único. Su apodo, la “Ciudad Blanca”, proviene de la escuela de arquitectura funcional Bauhaus (1919-1933) que dio forma a gran parte del paisaje urbano de la ciudad.

Exhibición en el Centro Bauhaus. Foto: Marion Fischel

Establecido en 2000 con la misión de educar al público sobre esa escuela alemana dedicada al arte y el diseño, el Centro Bauhaus en Dizengoff 77 combina un museo, un espacio de exhibición y una tienda dedicada a diseños israelíes originales e influenciados por esa estética.

Todos los viernes a las 10 el centro ofrece su famoso “Tour Bauhaus Por la Ciudad Blanca”. Es el único tour de arquitectura Bauhaus autorizado por el Ministerio de Turismo.

Se puede alquilar una audioguía (con ocho idiomas disponibles) y realizar una visita autoguiada al centro.

Cualquiera de las opciones cuesta 80 shekels -unos 25 dólares- por persona. También se ofrecen tours privados.

El Dizengoff Center, diseñado por el arquitecto israelí Itzhak Yashar del Museo de Arte de Tel Aviv, modificó la cara de un barrio construido en 1922 para nuevos inmigrantes y sobrevivientes judíos de los sangrientos disturbios de 1921 en Yafo.

Construido en etapas durante una década desde principios de la década de 1970, el centro comercial de dos secciones en la esquina con la calle King George se extiende a ambos lados de Dizengoff, conectado por puentes peatonales cubiertos y pasajes subterráneos.

Jardín en la azotea del centro comercial Dizengoff Center. Foto: Marion Fischel

Además restaurantes, el Dizengoff Center tiene una piscina y un gimnasio en la azotea del Holmes Place, una sala de cine con seis opciones, tiendas de cómics y refugios para coleccionistas de estampillas, así como un refugio antiaéreo equipado con duchas y salas familiares.

Dentro y fuera de la plaza

Eventualmente, un paseo por Dizengoff llevará a los visitante a la Plaza Dizengoff -o Kikar Dizengoff- llamada así en homenaje a la esposa del alcalde, Zina Brenner Dizengoff.

Esta plaza en la esquina de las calles Reines y Pinsker es un oasis de calma en el ajetreado centro de la ciudad.
En la década de 1930, la nueva plaza fue el primer gran espacio público abierto de la ciudad.

Letrero original de la Plaza Dizengoff. Foto: Marion Fischel

A los lugareños les gusta quejarse de la pérdida de la colorida e icónica fuente de Yaacov Agam, que dominó la plaza desde 1986 hasta 2018.
Pero el nuevo emplazamiento es elegantemente discreto y le da a la plaza un ambiente europeo.

Un área pavimentada y secciones de césped bien cuidado con bancos y tumbonas completan la imagen del área como un lugar familiar durante el día.

Los visitantes pueden tomarse un descanso en uno de varios cafés al aire libre alrededor de la plaza, en particular en el Café Nachat, que obtiene, mezcla y tuesta sus propios granos de café.

Otro sitio cerca de la plaza es el bien llamado Café Popular de dos pisos en la intersección de Dizengoff y Arlozorov, dentro de la boutique del hotel Jacob Samuel.

Detrás de la fuente, fuera de la plaza, está el café, bar y restaurante 6 de mayo, que lleva el nombre del proyecto anterior de los propietarios (el 5 de mayo, el primer bar en el mercado Majané Yehuda de Jerusalén).

El modesto restaurante sirve deliciosas opciones vegetarianas, así como platos a base de carne.

Un brunch en Little Paris es, claramente, una experiencia francesa. El lugar está debajo del elegante hotel boutique de diseño Cucu .

El Dizengoff Café fomenta la bebida matutina al ofrecer cava, mimosas o Kir Royal a 14 shekels (alrededor de cuatro dólares) y su “Happy Hour” de lunes a viernes de 18 a 20 incluye un 20 por ciento de descuento en la mayoría de los artículos del menú.

De 7:30 a 10:30 es posible tomar un café y pasteles por 12 shekels -unos 3,50 dólares-.

Panaderías

La Bonne Patisserie. Foto: Marion Fischel

En Dizengoff hay muchas panaderías y es posible que los mejores croissants se encuentran en La Bonne Patisserie.

El propietario de Big Pet en Dizengoff 225, hogar de todos los dulces que los perros siempre soñaron, indicó que prefiere Bakery en Dizengoff 260.

Cenas elegantes y cocteles

Si lo que se busca es un restaurante con platos especiales, FU Sushi, abierto desde el mediodía hasta la medianoche, es muy recomendable por su sushi artesanal, el excelente ambiente y los deliciosos cócteles.

Spicehaus Cocktails sirve cócteles artesanales de calidad junto con comida de bar atípica como ceviche y coliflor en un ambiente elegante adecuado para encuentros casuales y citas. Funciona de 18 a 3.

Joyas y bijouterie

Joyas en Dizengoff. Foto cortesía de Malka Jewelry

Si la idea es comprar joyas, Malka tiene piezas exclusivas y exquisitas hechas a mano y a la medida.

Para joyería antigua y vintage, vale la pena consultar en Antiquette en Dizengoff 184.

Helados y más

Mientras que la siempre presente heladería Golda deslumbra en Dizengoff 107, Mystic Artisan Ice Cream en Dizengoff 138 está en otro nivel.

Mystic Artisanal Ice Cream en Dizengoff lleva a los helados a otro nivel. Foto: Marion Fischel

Hay varias tiendas AM:PM: la de Dizengoff 193 está convenientemente ubicada para comprar algo para comer en el hotel o en casa.
También hay sucursales de Tiv Ta’am (una cadena de alimentos que vende productos no kosher) en Dizengoff 16 y Dizengoff 199.

Peluquerías

¿Qué tal un nuevo look o simplemente un corte de pelo de rutina?

Si bien hay varios peluqueros y estilistas en Dizengoff, Avi Amir es famoso por su ambiente profesional, decoración elegante y exquisita selección de bebidas alcohólicas para mejorar la experiencia de mimarse.

Avi Amir Hair Design en Dizengoff Street. Foto cortesía de Avi Amir

Tiendas destacadas

Pel Concept, una tienda fundada en 1976 por Hana Yarden que aún la dirige, vende moda japonesa para mujeres en Dizengoff 76.

A su vez, Molecule ofrece una variedad de perfumes de alta gama de todo el mundo en Dizengoff 70.

Estancia en un hotel diferente

El Cinema Hotel fue originalmente el cine Esther, uno de los primeros de Tel Aviv. Es un edificio Bauhaus de la década de 1930 en la plaza Dizengoff aunque su dirección oficial Zamenhof 1.

El encantador Cinema Hotel en Kikar Dizengoff conserva recuerdos de la sala de cine que alguna vez estuvo allí. Foto: Marion Fischel

El encanto del hotel proviene de su antigua encarnación como sala de cine, con objetos de interés originales en exhibición que capturan una época pasada.
El alojamiento boutique de 83 habitaciones también tiene una amplia azotea.