La ONG SmartAID de Israel comenzó a entregar cientos de miles de máscaras y equipamiento sanitario a hospitales que tratan a pacientes con coronavirus en las provincias chinas de Hubei y Shandong.

La iniciativa fue organizada en conjunto entre los equipos de respuesta de emergencia de SmartAID en Israel, Australia y EEUU con la colaboración del servicio de entrega global DHL y los socios chinos de la organización de ayuda humanitaria.

El jueves 13 de febrero partió de Tel Aviv hacia China el primer envío de máscaras. «Junto a sus socios chinos, SmartAID continúa preparando suministros médicos adicionales que serán enviados a China desde varios sitios de Israel y Europa», afirmó el cofundador de SmartAID Shachar Zahavi.

Personas en un metro de Shanghai usan máscaras para protegerse del coronavirus. Foto: Shutterstock.

Hasta el viernes 14, unos 1.716 trabajadores médicos habían contraído el virus COVID-19 y seis de ellos murieron. Al cierre de este artículo, 1.669 personas perdieron la vida a causa de la enfermedad.
La mayoría de los más de 68.500 casos de infección por coronavirus reportados hasta el sábado se dieron en la provincia de Hubei.

Respuesta y acción de Magen David Adom e IsraAID

Otras dos ONG de Israel enviaron suministros para ayudar a combatir la epidemia.

La red de emergencia nacional de Israel Magen David Adom (MDA) envió a China 2.000 máscaras y 200 kits completos de protección para ayudar a prevenir la propagación del coronavirus.

Un voluntario del Magen David Adom empaca los suministros de protección para enviar a China. Foto cortesía de MDA

Los trajes especiales, mascarillas, gafas, zapatos y cofias fueron donados al país del Lejano Oriente y fueron distribuidos por Jabad Lubavitch China, que tiene 14 sucursales en ese Estado.

Por otra parte, la organización de ayuda humanitaria IsraAID realizó un envío de suministros médicos de emergencia y equipo de protección al Ministerio de Salud de China. La iniciativa se concretó gracias al apoyo de la Cámara de Comercio Israel-China, INNONATION y David Ashkenazi de ICCB Capital.

Los suministros médicos reunidos por IsraAID y sus socios fueron enviados a China el 3 de febrero pasado. Foto: cortesía

“IsraAID seguirá monitoreando la situación y, si es necesario, lanzará una respuesta secundaria que incluya asistencia en áreas como salud mental y apoyo psicosocial para con trabajadores de ayuda humanitaria y personal de primeros auxilios que trabajan en el área para aliviar el estrés», afirmó Yotam Polizer, vicepresidente de la ONG. Y añadió: “Todos estamos muy preocupados por la propagación del coronavirus y agradecemos el valiente trabajo realizado por los equipos médicos chinos. Es importante para nosotros hacer nuestra parte enviando suministros de ayuda y compartiendo nuestra experiencia en el manejo del estrés y la reducción del trauma».

Al momento de publicar este artículo, el nuevo coronavirus 2019-nCoV, reportado por primera vez el 31 de diciembre de 2019 en la ciudad china de Wuhan, ya causado la muerte de 1.369 personas y la infección a otras 60.000.
Días atrás, China había emitido un llamamiento urgente pidiendo equipos médicos de protección.

«El Magen David Adom, la organización humanitaria más grande del país, respondió de inmediato a la solicitud en China para ayudar a lidiar con la propagación del coronavirus en ese país», manifestó Eli Bin, el director general del MDA.

El representante de Jabad, el rabino Eliyahu Rosenberg de Guangzhou, fue quien partió a China con todo el equipo de MDA. Bin dijo que los emisarios de Jabad pusieron el equipo a disposición de los israelíes y residentes locales que viajan con frecuencia.

El rabino de Jabad Eliyahu Rosenberg de Guangzhou recibió el equipo de protección del Magen David Adom para su distribución en China. Foto cortesía de MDA.

Rosenberg agradeció a Bin y sus representantes por la pronta ayuda y respuesta. Desde el momento en que se realizó la llamada al MDA, el tratamiento y la capacidad de respuesta fueron extremadamente rápidos, según contó el religioso.

Mientras tanto, el primer ministro Benjamín Netanyahu instruyó al Instituto de Biología y al Ministerio de Salud a trabajar en la producción de una vacuna para el virus y crear una nueva red de vacunación en Israel.