El oso andino, el capuchino de frente blanca y varios tipos de jaguares no tiene que preocuparse más ahora que la organización israelí This is My Earth (TiME) ha comprado parte de su hábitat en la selva amazónica del Perú.

TiME ha llevado a cabo una campaña de financiación colectiva para comprar 700 hectáreas en una región donde se encuentran muchas especies vulnerables a la extinción.

La organización es idea de los profesores Uri Shanas, de la Universidad de Haifa y Oranim Academic College, y Alon Tal, de la Universidad de Tel Aviv, cofundador de la Unión Israelí para la Defensa del Medio Ambiente y del Instituto Arava de Estudios Ambientales.

Cualquiera puede ser miembro de TiME. Con el pago de tan sólo un dólar como cuota de inscripción la persona tiene derecho a votar en qué regiones debe invertir la organización.

Así pues, en el caso de Perú, más del 50% de los miembros votaron por la compra en una región conocida como los Jardines Ángel del Sol, dejando por fuera terrenos en Belice y Kenia que también estaban siendo considerados. La región lleva el nombre de una especie de aves en peligro de extinción conocidos como colibrís reales o ángeles del sol.

Los terrenos formarán parte de una reserva natural que manejarán los residentes.

También se beneficiarán poblaciones más cercanas, entre ellas el distrito de La Primavera, que se encuentra a día y medio de camino de los terrenos de TiME y que depende del bosque para filtrar el agua dulce y obtener electricidad a través de una pequeña planta de energía hidroeléctrica.

En 2016, las primeras tierras que compró la organización fueron en los Andes peruanos, donde se encuentra el mono choyo, o mono lanudo, en serio peligro de extinción.

“El 2,3 por ciento del planeta es descrito como ‘puntos calientes’, es decir, regiones que albergan una biodiversidad bastante rica, pero donde la vida animal y las plantas endémicas se enfrentan a la extinción”, explicó Shanas. “Por este motivo, proteger incluso un zona relativamente pequeña puede significar una enorme contribución a la protección de numerosas especies”.

TiME lleva su mensaje sobre los peligros de la desaparición de bosques y la extinción de especies también a colegios y universidades, y “busca dar a los estudiantes los medios para participar ofreciéndoles da la oportunidad de tomar parte en actividades concretas para salvar la tierra”.