Los submarinos y los camiones que funcionan con baterías eléctricas son, aparentemente, una combinación tan extraña como el agua y el aceite. Sin embargo, lo que tienen en común es técnicamente sólido y, además, tiene conexión con Israel.

Esa conexión es la firma británica-israelí Tevva, que descubrió cómo usar la tecnología de baterías eléctricas, desarrollada inicialmente para alimentar submarinos, para camiones ecológicos.

Eso ha despertado gran interés entre inversionistas. La compañía india Bharat Forge, el gigante de componentes para automóviles, ha invertido de 13 millones de dólares en Tevva, con la esperanza de llevar camiones eléctricos a las carreteras británicas y el concepto a India.

Tevva fue fundada por Asher Bennett, quien prestó servicio en la armada israelí y observó cómo los submarinos de Israel operan durante largas misiones en el mar.

La firma ha convertido ese conocimiento en un sistema que combina un generador a bordo, una batería de 74 kwh y un pequeño motor de combustión interna para crear lo que Bennett llama “los camiones más ecológicos del mundo”.

La combinación, que usa el generador para recargar la batería mientras el camión está en movimiento, le da a los camiones de Tevva “un alcance ilimitado y revolucionario”, dijo la compañía en un comunicado de prensa. Tevva no fabrica los camiones.

Asher Bennett, fundador de la firma. Cortesía de Tevva.

Una batería de la firma tiene una autonomía de 160 kms por sí sola. Pero con el sistema de autonomía extendida puede llegar a los 600 kms, lo cual es muy importante si se tiene en cuenta que muchos camiones viajan durante 10 ó 12 horas al día.

“La electricidad pura nunca se pensó para los camiones, por temor a que la batería se agote”, dijo Bennett a Times of Israel, un portal de noticias israelí, el año pasado.

Tevva tiene su propio software llamado PREMS (Predictive Range Extender Management System, o Sistema de Gestión Predictivo de Autonomía Extendida), que hace que el modo de conducción eléctrica se accione cuando el camión atraviesa zonas de bajas emisiones de dióxido de carbono y por el centro de las ciudades.

Los algoritmos del software calculan automáticamente cómo hacer más eficiente el uso de la batería y determinan cuando poner en marcha el sistema. El conductor no necesita hacer nada. Bennet, usando un término de moda en el campo de la conducción autónoma, llama al sistema “gestión autónoma de energía”.

Bennett fundó Tevva en Israel, pero trasladó la sede de la empresa a Chelmsford, en el Reino Unido, para aprovechar el potente sistema británico de componentes para la automoción. El UK Israel Tech Hub facilitó la mudanza, que es sólo “temporal”, insiste la firma. La compañía tiene la oficina de investigación y desarrollo en Tel Aviv.

Baba Kalyani, presidente y director general de Bharat Forge, dijo que la inversión que hizo la compañía llevará las “soluciones motrices de vanguardia de movilidad eléctrica de Tevva a nuestros clientes en India y en todo el mundo”.

Además de la inversión, Bharat Forge adquirió una licencia para comercializar la tecnología en India. Pero la inversión no es lo único que enorgullece a Tevva: UPS, la compañía de transporte urgente, ha hecho un pedido de 15 camiones después de poner a prueba una unidad durante 13 meses. Otro pedido ha sido hecho por Kuehne + Nagel, empresa de transporte y logística con sede en Suiza.

Los primeros inversionistas de Tevva han vuelto a invertir en ella y le han inyectado 2,4 millones de dólares esta vez, con los cuales el capital obtenido en esta ronda de financiación asciende 15,6 millones de dólares.

Bennett, jefe ejecutivo de la firma, es el hermano mayor del ministro de Educación de Israel, Naftali Bennett, otro emprendedor en el sector de la alta tecnología. Sus padres inmigraron de Estados Unidos a Israel.