La cena de la noche de Pésaj se llama seder y es uno de los rituales más llamativos.

La fiesta, que conmemora la libertad y éxodo de los israelitas de Egipto hace miles de años, es un mandato bíblico y se celebra durante una semana (este año empieza la noche del 27 de marzo).

El centro de atención de la cena es una banjeja en el cual los temas de la fiesta —cautiverio, redención y renovación— se simbolizan con hierbas amargas, perejil, matzá, o pan ácimo, y un huevo duro. En Israel se celebra un solo seder; las comunidades judías fuera del país celebran dos. El pan ácimo no contiene levadura y es el único que se puede consumir durante la fiesta.

Las costumbres para preparar y presentar esas comidas simbólicas en el plato varían entre familias, ciudades y países, pero prácticamente no hay reglas para seguir. A lo largo de la historia los platos del seder, palabra hebrea que significa “orden”, se han hecho de formas y tamaños diferentes. Algunos tienen la sencillez de la cerámica, otros son lo suficientemente grandes para tener espacio para el matzá, o pan ácimo. Los diseños modernistas de otros se han convertido en toda una nueva forma de arte.

Les presentamos a continuación siete platos que le servirán de inspiración para preparar su propio seder.

El Museo de Israel dice que éste es el plato de seder más antiguo que se conoce, hecho probablemente en España en la década anterior a la expulsión de los judíos de ese país, ocurrida en 1492. La inscripción en letras hebreas que se ve en el centro hace alusión a los principales elementos de la festividad.

Plato de cerámica, datado alrededor del año 1480. Cortesía del Museo de Israel, en Jerusalén, por Nahum Slapak.

El plato de esta foto, diseñado por los artistas israelíes Johnathan Hopp y Sarah Auslander, fusiona el pasado con el presente. Los dos rebuscaron platos usados en los mercados de pulgas de Yafo y cambiaron el diseño de estos imprimiendo en ellos motivos en cerámica que hacen referencia a la fiesta sobre los patrones originales.

Plato diseñado por Johnathan Hopp y Sarah Auslander. Cortesía del Museo Judío de Nueva York.

De tres niveles, este plato, hecho en Austria entre el siglo dieciocho y diecinueve, muestra cuatro cálices en la parte superior para colocar las comidas simbólicas de la fiesta. En las tres bandejas del interior se pone la matzá.

Cortesía del Museo de Israel en Jerusalén por Yair Hovav.

Este plato, llamado Tangram, producido por Studio Armadillo fue hecho a mano en Israel con caoba. Su diseño, moderno y triangular, le da un toque lúdico a la tradicional mesa de Pésaj.

Cortesía del Museo de Israel en Jerusalén por Yair Hovav.

La ceramista israelí Yaara Nir Kachlon diseñó este plato de cerámica que lo caracteriza un acabado blanco cremoso y de aspecto ligero.

El platico del centro está adornado con la palabra hebrea que significa Pascua. La simplicidad del juego hace que resalten las comidas simbólicas y refleja la intención del diseño de Kachlon: “Deberíamos disfrutar las cosas sencillas de la vida, pero nunca de forma ordinaria”.

Plato de Yaara Nir Kachlon. Cortesía del Museo Judío de Nueva York.
  1. El diseño de este plato, que data de finales del siglo diecinueve y principios del veinte, se inspiró en platos de seder más antiguos hechos en Italia. Las ilustraciones de una Agadá de Pascua están estampadas y cinceladas en el borde, que es de plata. En el centro hay una inscripción en hebreo que menciona el orden del seder y la bendición que debe decirse sobre la matzá.
  2. La agadá es un libro que se lee durante la cena que menciona el éxodo de Egipto y que contiene las oraciones que deben decirse sobre las comidas que se consumen en ella.
  3. Plato de plata inspirado en antiguos otros más antiguos hechos en Italia. Foto © Museo de Israel de Jerusalén por Yair Hovav.
  1. Los ceramistas israelíes Sharon Boneh y Hani Kleinhaus, de Fresh Pottery, diseñaron este plato de cerámica de tacto terroso con seis pequeños tazones para cada uno de los alimentos simbólicos de la Pascua.
  2. Este plato de cerámica llama la atención por su sencillez. Cortesía.