Mientras una delegación israelí de 120 personas se une esta semana a los líderes mundiales en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) que se realiza en Glasgow, Escocia, científicos, empresarios, activistas, educadores, clérigos y artistas de Israel trabajan para comprender y abordar la crisis climática global y sus consecuencias.

Una de ellas es la geocientífica marina de la Universidad de Haifa Beverly Goodman-Tchernov, que considera que la crisis abarcar desde la inseguridad alimentaria hasta los desastres naturales y que por ello es fundamental tener un enfoque multidisciplinario.

“La solución de los problemas del cambio climático no se va a alcanzar usando un único enfoque. Esto va a requerir que todos se sienten a la mesa con sus herramientas más potentes. Ya pasamos el punto en el que podemos preguntarnos si el cambio climático realmente está ocurriendo y quién tiene la culpa. Hoy, la verdadera pregunta es si continuaremos con la misma ‘normalidad’ que nos dieron nuestros padres, abuelos y bisabuelos o si estamos listos para asumir una nueva en la que podamos utilizar la tecnología y el conocimiento que tenemos. Debemos frenar, y tal vez incluso revertir el daño que ya hemos hecho”, le dijo la científica a ISRAEL21c en Español.

La ministra de Protección Ambiental Tamar Zandberg y el presidente Isaac Herzog tomaron muestras de pollo cultivado de la compañía Future Meat porque Israel adopta de forma oficial a las proteínas alternativas como parte de su estrategia nacional de clima antes de la COP26. Foto: Amos Ben Gershom/cortesía de Good Food Institute

Antes de la COP26, el presidente Isaac Herzog nombró a funcionarios gubernamentales, académicos y empresarios para un nuevo Foro Climático de Israel para diseñar el papel que tendrá el país.

En ese marco, Herzog afirmó que la crisis climática es “una oportunidad para Israel de hacer ‘tikun olam’, de reparar el mundo y ser parte del mayor desarrollo positivo de nuestra generación. Aunque nosotros como país pequeño no somos un actor importante en la creación de la crisis, ciertamente podemos ser un actor significativo en la respuesta a ella”

Así, el Gobierno se encuentra preparado para aprobar nuevos proyectos de transporte “limpio”, eficiencia energética, reducción de emisiones de carbono y programa para fomentar la innovación tecnológica climática.

“El estado de la tecnología climática de Israel 2021”, un nuevo informe de la Autoridad de Innovación de Israel y la comunidad PLANETech del Instituto de Innovación de Israel, presenta a 1.200 empresas que desarrollan tecnologías que podrían mitigar el cambio climático en cuestiones como la como agricultura, energía limpia, movilidad y transporte, infraestructura hídrica. y proteínas alternativas.

20 líderes climáticos

De cara la cumbre, ISRAEL21c en Español creó una lista con algunos de los más importantes activistas israelíes que se ocupan de este problema. Algunos de ellos ya están en Glasgow como participantes u observadores.

Yosef “el Capitán Sunshine” Abramowitz es pionero en campos solares en Israel y activista por el acceso equitativo a la energía renovable. Como inversor de impacto, dirige Gigawatt Global, un desarrollador de energía renovable para África y otros mercados emergentes; y Energiya Global Capital, socio de Gigawatt en Jerusalén.

Yosef Abramowitz. Foto: Nicole Kaplan

Yosef Abramowitz fue nominado por 12 países africanos para el Premio Nobel de la Paz 2021 y nombrado por CNN como Pionero Verde en 2012.
Además formó parte del equipo negociador israelí en la Conferencia Climática de París.

“La crisis climática es una amenaza para nuestra forma de vida, seguridad alimentaria y del agua, seguridad nacional y economía. En Israel no tenemos un mercado libre y abierto para la energía y menos ciertamente para la energía renovable. Ésta es nuestra mayor amenaza estratégica. Israel podría ser un líder mundial en agrovoltaica y duplicar el uso de las tierras agrícolas existentes para generar energía renovable. Podríamos ser el primer país en ser 100 por ciento solar día y noche, usando el 10 por ciento de nuestra tierra. Israel debería convertirse en un centro mundial de experiencia e implementación de agrovoltaica”, expresó Abramowitz

Doctor Tareq Abu Hamed, director ejecutivo del Instituto Aravá de Estudios Ambientales. Foto cortesía del Instituto Aravá

Tareq Abu Hamed es el nuevo director ejecutivo del Instituto Aravá de Estudios Ambientales, que dicta programas académicos acreditados, dirige centros de investigación y crea iniciativas de cooperación internacional enfocadas en los desafíos ambientales.

En 2008, Abu Hamed fundó el Centro de Energía Renovable y Conservación de Energía del instituto. En 2013 fue científico adjunto en jefe del Ministerio de Ciencia y luego fue científico jefe interino, convirtiéndose así en el palestino de más alto rango en el Gobierno de Israel.

“Los imperiosos desafíos ambientales que enfrenta Oriente Medio son transfronterizos porque el agua, el aire, la flora y la fauna son compartidos por los diferentes países más allá del conflicto político en curso. De ese modo, la cooperación para resolver estos desafíos para mitigar y adaptarse al cambio climático es esencial”, indicó Abu Hamed.

El profesor Ori Adam, director académico del Centro de Ciencias del Clima de la Universidad Hebrea. Foto cortesía de la Universidad Hebrea.

El profesor Ori Adam dirige el Centro de Ciencias del Clima de la Universidad Hebrea (HUCS) y es docente titular en el Instituto de Ciencias de la Tierra de esa casa de estudios.

En la actualidad, el HUCS construye el primer modelo climático israelí, diseñado exclusivamente para la región, para brindar información confiable y procesable para los esfuerzos de mitigación climática de la región.

“El cambio climático afecta a cada región de una manera particular. Por lo tanto, además de los esfuerzos globales para reducir las emisiones y la contaminación, los esfuerzos de mitigación deben ser a nivel estatal o regional. En primer lugar, deberíamos concentrar el trabajo en producir información fiable y procesable, algo que no existe en la actualidad. Solo así podremos idear soluciones tecnológicas para mitigar el inevitable calentamiento adicional que se espera en las próximas décadas”, dijo Adam.

La profesora Ofira Ayalon. Foto: Karnit Yahav

La profesor Ofira Ayalon es la ex titular del Centro de Información sobre el Cambio Climático de Israel.

En la actualidad dirige el Grupo de Medio Ambiente y Energía en el Instituto Samuel Neaman, el Instituto de Tecnología Technion-Israel y el Departamento de Recursos Naturales y Gestión Ambiental de la Universidad de Haifa.

“El reloj de arena del Planeta Tierra se agota rápidamente. El punto de no retorno de los efectos adversos climáticos se acerca a gran velocidad. Es obligatorio que haya un esfuerzo conjunto de países, organizaciones, inversores, innovadores, empresarios, ONG y toda la humanidad para mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero y tomar las medidas cruciales para adaptarse a estos efectos”, definió Ayalon.

Gidon Bromberg, cofundador y director de EcoPeace Middle East en Israel. Foto cortesía de EcoPeace

Gidon Bromberg cofundó EcoPeace Middle East, una iniciativa que reúne a jordanos, palestinos e israelíes para crear soluciones de agua compartidas. Desde hace 27 es su director local.

Abogado de formación, Bromberg se presentó ante el Consejo de Seguridad de la ONU, la Cumbre Climática de Naciones Unidas, el Congreso de EEUU, el Parlamento Europeo y otros foros internacionales para disertar sobre la relación entre los problemas del agua y la paz en Oriente Medio.

“El conflicto en la región es una situación problemática que la crisis climática hace aún más desesperada. Es por eso que EcoPeace presentó el ‘Green Blue Deal’, para crear soluciones compartidas en temas cruciales como la energía, el agua, la inversión y la educación. Al trabajar juntos, una coalición de personas está cambiando la mentalidad, fomentando interdependencias saludables y construyendo un marco para la paz”, contó Bromberg.

Doctor David Dunetz. Foto cortesía

El doctor David Dunetz es especialista en la enseñanza sobre el cambio climático y la sustentabilidad.
Cofundó y dirigió la Red de Escuelas Verdes, es jefe de educación en el Centro Heschel para la Sustentabilidad -donde dirigió el Proyecto de Cambio Climático- y en la actualidad está creando la primera Asamblea de Ciudadanos Climáticos en Israel.

“Como escribió Naomi Klein -la activista climática canadiense-, ‘para cambiar todo, necesitamos a todos’. Hay que hacer frente al enorme desafío del cambio climático y esto requiere que transformemos nuestras vidas y relaciones. Esto es al mismo tiempo una emocionante oportunidad de hacer las cosas bien, trabajar para construir una sociedad más justa, humana y afirmar la vida”, manifestó Dunetz.

Doctora Beverly Goodman-Tchernov. Foto cortesía

La doctora Beverly Goodman-Tchernov es la presidenta del departamento de geociencias marinas de la Escuela Charney de Ciencias Marinas de la Universidad de Haifa.

Allí usa pistas de arena, barro y suelo para comprender cómo está cambiando el clima, de qué forma se ve afectado el medio ambiente, cómo interactuaron los humanos con estos cambios en el pasado y qué es posible podemos esperar en el futuro.
Un ejemplo es saber por qué aumentaron las tormentas y la erosión costera, algo que podría hacer que desastres como los tsunamis sean aún más peligrosos.

“Trato de analizar y evaluar las condiciones en lugares remotos (el fondo del océano, las costas, el Mar Muerto) para comprender cómo incluso en estos lugares que parecen intocables estamos cambiando la química y la composición de las partes más básicas”, dijo Goodman-Tchernov.

Carmel Horowitz en Islandia. Foto: Doron Horowitz

Carmel Horowitz es un animador 3D que inició una campaña de promoción de base llamada Sede de Emergencias Climáticas y Ecológicas para instar a Israel a implementar objetivos climáticos más ambiciosos.

También crea y publica videos, infografías y pinturas digitales en Facebook “para educar e inspirar a las personas de todo el mundo a que se cambien a sí mismas y a su entorno”.
“Como ciudadanos preocupados que escuchan a los mejores científicos climáticos, nos dimos cuenta de que las ilusiones no cerrarán la inmensa brecha entre los planes climáticos actuales y lo que realmente hay que hacer para salvar nuestro futuro. Por eso soy creador de arte ambiental digital, porque quiero que la gente se preocupe. Si no te importa, no actúas. Y es difícil preocuparse porque el problema es tan grande que es difícil de entender”, declaró Horowitz.

Maya Jacobs, directora general de Zalul. Foto: Dor Malka

Maya Jacobs es la directora ejecutiva de Zalul, una de las ONG medioambientales más influyentes de Israel.
Suele disertar sobre temas ambientales en medios y conferencias, y tiene experiencia en consultoría y estrategia de medios, lobbying y asuntos públicos. En 2019, la revista Lady Globes la nombró como una de las 20 principales mujeres activistas en Israel.

“Así como hicimos con la respuesta inmediata al COVID-19, todos, desde todos los ámbitos de la vida, tenemos que hacer todo lo que esté al alcance para detener la escalada del cambio climático mientras podamos. No tenemos tiempo para soluciones a mitad de camino, debemos crear un cambio en muchos campos: dejar el uso de combustibles fósiles, cambiar a un transporte público limpio, modificar la planificación urbana, dejar de usar plástico desechable, proteger los árboles, dejar de comer alimentos basados ​​en animales y más. De todos modos, hay espacio para el optimismo porque habrá creación de nuevos empleos, inversiones y oportunidades, además del impacto que vivirán las personas, empresas y organizaciones al unirse a la lucha internacional para asegurar un mundo más saludable y seguro”, remarcó Jacobs.

El profesor Paul Kamoun. Foto cortesía de JCT

El profesor Paul Kamoun es director del laboratorio de tecnología espacial y teledetección de la Facultad de Tecnología de Jerusalén.

Como tal, usa imágenes de satélite para estudiar las causas y consecuencias del cambio climático y para cuantificar y comparar sus factores desencadenantes naturales y provocados por el hombre.

“No podemos afirmar que la contribución del hombre al calentamiento global sea exactamente esto o aquello. Si tuviéramos esos datos en nuestras manos, es más probable que todos los países del mundo lleguen a un consenso sobre qué hacer”, aseguró Kamoun.

Dov Khenin habló en la Knesset en 2019. Foto: Yonatan Sindel/Flash90

Dov Khenin es un exlegislador que dirige la iniciativa de Cambio de Dirección de la Universidad de Tel Aviv, un proyecto que propone objetivos políticos para Israel en cuestiones como energía, transporte, agricultura, alimentación, planificación urbana y educación. También es el director del nuevo Foro Climático de Israel antes mencionado.

“El cambio climático crea una verdadera emergencia en todo el mundo y en Israel pero los científicos nos dicen que todavía hay una ventana de oportunidad para el cambio. En ese sentido, Israel debe y puede contribuir al esfuerzo global en el campo de la innovación tecnológica y las soluciones sociales creativas, entre otras cosas. Estos cambios también pueden mejorar nuestra vida diaria, aquí y ahora”, dijo Khenin.

Uriel Klar, director de PLANETech del Instituto de Innovación de Israel. Foto cortesía de PLANETech

Uriel Klar es el titular de la comunidad PLANETech del Instituto de Innovación de Israel, que promueve el desarrollo y la implementación de tecnologías de cambio climático y funciona como red para el ecosistema de tecnología climática del país y del mundo.

Klar es ingeniero ambiental y su especialidad es conectar la tecnología, las empresas y las misiones ambientales para resolver los desafíos del cambio climático. Con ese ímpetu fundó una compañía de investigación ambiental y una startup de tecnología de contaminación del aire, y desarrolló asociaciones globales en una empresa multinacional de agua.

“Israel es uno de los líderes mundial en tecnología climática. Cuenta con 1.200 empresas que ayudan a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en Israel y en todo el mundo. Las startups que luchan contra el cambio climático construirán una nueva generación de unicornios en Israel”, vaticinó Klar

La profesora Noga Kronfeld-Schor, científica jefa del Ministerio de Protección Ambiental. Foto: Yael Zur

La profesora Noga Kronfeld-Schor es científica jefa del Ministerio de Protección Ambiental e investigadora de la Escuela de Zoología de la Universidad de Tel Aviv.

Su trabajo abarca el campo de la fisiología ambiental y del impacto del calentamiento global y la contaminación lumínica en la biodiversidad y en la salud humana y ambiental.

“La tercera década de este siglo está caracterizada por el entendimiento de que para que nosotros y nuestros hijos podamos llevar una vida sana y equitativa, debemos tener en cuenta la naturaleza y protegerla. El calentamiento global está amenazando la vida en nuestro planeta. Las consecuencias son complejas y apenas estamos empezando a comprenderlas. Por ello se necesita una investigación extensa. Hay que desarrollar la capacidad de predecir los efectos generales del aumento de las temperaturas, ecológica, económica y socialmente, con el fin de desarrollar formas y medios para abordarlos si es que esto es posible”, expresó Kronfeld-Schor.

Doctor Doron Markel, científico jefe del KKL-JNF. Foto cortesía de KKL-JNF

Doron Markel es científico jefe del Fondo Nacional Judío Israelí-Keren Kayemet LeIsrael (KKL-JNF), la ONG ambiental más grande de Israel. Fue el representante de la organización e Israel en la 12° Conferencia Internacional sobre Cambio Climático en Cuba en 2019.

El KKL-JNF implementa soluciones innovadoras de gestión de la tierra desde antes del establecimiento del Estado. Hoy comparte conocimientos a nivel internacional y promueve proyectos de investigación a gran escala que ponen a Israel a la vanguardia en la lucha contra los problemas del clima y la desertificación que afectan el bienestar de la población regional.

“El KKL-JNF desarrolla el Centro Global para Combatir la Crisis Climática. Es un espacio de innovación internacional que se encargará de crear soluciones tecnológicas para ayudar en la lucha contra el cambio climático. Esperamos fomentar una atmósfera de cooperación global para promover estos avances con los países del Golfo Pérsico y otros actores regionales”, indicó Markel.

El rabino Yonatan Neril es el director del Centro Interreligioso para el Desarrollo Sostenible. Foto cortesía de ICSD

El rabino Yonatan Neril fundó y dirige el Centro Interreligioso para el Desarrollo Sostenible y su rama de Eco Seminarios Judíos. Allí charla sobre religión y cambio climático.
Neril coorganizó 12 conferencias interreligiosas sobre ecología y clima y es coautor de “Eco Bible: An Ecological Commentary” (Eco Biblia: un comentario ecológico).

“En un nivel más profundo, para frenar el cambio climático, necesitaremos cambiar de un estilo de vida de consumo a uno que se conecte con la naturaleza y muestre cuidado e interés por toda la creación de Dios”, declaró el religioso.

El profesor Colin Price de la Universidad de Tel Aviv. Foto: Noam Wind

El profesor Colin Price es el titular del Centro de Acción contra el Cambio Climático de la Universidad de Tel Aviv y del departamento de estudios ambientales de la Escuela Porter de Ciencias del Medio Ambiente y la Tierra de dicha facultad.

“Luego de tres décadas de investigar la ciencia del cambio climático, es el momento de buscar soluciones a la crisis. En la Universidad de Tel Aviv recientemente lanzamos un centro para enfocarnos en soluciones innovadoras a la crisis climática. Estas soluciones incluyen no solo tecnologías sino también ideas innovadoras sobre regulaciones, políticas, seguridad regional, finanzas, ciencias del comportamiento, salud pública y más. El enfoque interdisciplinario es crucial para resolver estos problemas urgentes”, afirmó Price.

Arik Rosenblum fue director ejecutivo de la organización sin fines de lucro EcoOcean. Foto cortesía de EcoOcean

Durante siete años, Arik Rosenblum se desempeñó como el director ejecutivo de la ONG EcoOcean, que dirige el buque de investigación Mediterranean Explorer y el Centro de Educación Megalim, y enseña a los escolares en hebreo y árabe sobre la protección del medio ambiente marino y costero.
Sus programas se enfocan en crear áreas marinas protegidas, combatir la contaminación plástica y mantener playas sustentables.
La red nacional de voluntarios de emergencia marítima de EcoOcean ayudó a limpiar un desastroso derrame de alquitrán en febrero de este año.

“Brindamos datos que prueban el cambio climático y sus consecuencias. Educamos a la gente y tratamos de educar a quienes toman las decisiones. Y lideramos actividades que buscan reducir el impacto del cambio climático y también intentan proteger la biodiversidad de la naturaleza y la capacidad de la humanidad para cuidarse de sus propias locuras”, remarcó Rosenblum.

El profesor Daniel Rosenfeld de la Universidad Hebrea de Jerusalén. Foto cortesía

El profesor Daniel Rosenfeld de la Universidad Hebrea de Jerusalén es experto mundial en modificación del clima y cambio climático.
Como tal investiga los amplios impactos climáticos de las partículas de contaminación del aire en las nubes.

Rosenfeld presidió el comité sobre modificación meteorológica de la Sociedad Meteorológica de EEUU y copresidió la iniciativa internacional climática de aerosoles, nubes y precipitaciones.
Es el autor principal (y único israelí) del 6° Informe de Evaluación del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático, que asegura que la humanidad es responsable del calentamiento global de 1,09 grados Celsius  desde la revolución industrial.

“Las emisiones de partículas contaminantes del aire provocadas por el hombre pueden compensar parte del calentamiento inducido por las emisiones de gases de efecto invernadero al mejorar las nubes de bajo nivel que reflejan más radiación solar de regreso al espacio. La predicción del calentamiento global requiere una comprensión cuantitativa de cómo la cubierta de nubes y el contenido de agua se ven afectados por los aerosoles artificiales”, explicó Rosenfeld.

Doctor Richard H. Schwartz. Foto cortesía

El profesor Richard H. Schwartz es presidente emérito de Jewish Veg y autor de libros como “Vegan Revolution: Saving Our World (Revolución Vegana: salvando a nuestro mundo), Mathematics and Global Survival” (Matemáticas y supervivencia global) y “Who Stole My Religion?” (¿Quién se robó mi religión).
Con su trabajo, dice, ayuda a revitalizar el judaísmo y a aplicar los valores judíos para ayudar a sanar al planeta en peligro.

“Si bien hay que hacer todo lo posible para evitar la catástrofe climática que se avecina, el mejor enfoque es un cambio social hacia dietas basadas en plantas. Esto reduciría de forma significativa las emisiones de gases de efecto invernadero, con muchas menos vacas y otros animales de granja que emiten metano, y permitiría plantar vegetación en las vastas áreas que hoy se usan para el pastoreo y la cría de cultivos para animales, reduciendo así el nivel de dióxido de carbono atmosférico”, detalló Schwartz

Profesor Alon Tal. Foto: Gabriella Tal

El profesor Alon Tal es un veterano activista medioambiental, miembro de la Knesset y profesor de políticas públicas en la Universidad de Tel Aviv.
A lo largo de los años ayudó a crear muchas organizaciones como Adam Teva V’din, la Unión de Israel para la Defensa del Medio Ambiente, el Instituto Aravá, EcoPeace y This is My Earth.

“El cambio climático ya no es una preocupación remota y vaga sino una realidad amenazante. Somos testigos de lluvias e inundaciones extremas, incendios frecuentes, sequías y días muy calurosos en Israel. En todo el mundo, muchos observaron desde hace tiempo que somos la primera generación en sentir el calentamiento de la tierra, y la última que es capaz de hacer algo al respecto. Debemos ser absolutamente parte de la solución internacional. Todavía podemos servir como una ‘luz para las naciones’, una luz que funcione enteramente con energía renovable”, declaró Tal.